FEZ
La única pena es no haberla soñado
bajo las heladas estrellas del desierto.
no haber oído resonar los ecos de su fama
en los caravanserrallos de Samarkanda o
en los bazares de Peshawar
Atravesar el Estrecho no basta, Fes esta
demasiado lejos para hallarse tan cerca.
(M Fletcher)
Al ver por primera vez la Medina de Fez se nos mete por los ojos hasta la superficie del alma, transmitiéndote un secreto inquietante que nos atañe, haciéndonos sentir guerreros o amantes obligados a rendir una plaza, y tratar de buscar sus rincones sorprendentes y enriquecedores.
Paseando por la Medina con sus ejes principales desde donde salen otros más pequeños que penetran como capilares en el tejido, se ramifican y terminan en callejones que dan acceso a las casas y a la cara oculta de la ciudad, el espacio privado y te encuentras sumergido en dos mundos opuestos y complementarios al mismo tiempo dando origen a su forma de vida:
el espacio publico
el espacio privado
el del trabajo y la familia
el del hombre y la mujer
el de la calle y la casa
el del caos y la calma
el ruido y el silencio
la suciedad y la limpieza
los olores penetrantes y el aroma sutil
En cada nueva visita se transforma o nos transforma, enfrentándonos con nosotros mismos para afrontar sus secretos y una vez superados te encuentras con la hospitalidad de la gente delicada y refinada que te dicen una palabra amable o te ofrecen una sonrisa delicada.
Descubrir la autentica Fez, dejando que tus sentidos te conduzcan sin prisas por los abarrotados zocos,
La visión de la Medina no es posible agotarla, siempre hay algo nuevo, una calle, un rincón, una luz nueva, una sonrisa algo diferente que ofrecerte, hay que recorrerla con paciencia, no se entrega ni rápida ni fácil, ni total tienes que tener un apasionado romance con ella y poco a poco ir adentrándote y descubriéndola, admitir su urbanismo caótico y su deterioro, su belleza arquitectónica y cultural y esta dualidad denota una personalidad, un saber vivir, donde la risa y la melancolía brotan mas espontaneas.
Fez , supone la esencia de los sueños de todo viajero, la más antigua e interesante Ciudad Imperial de Marruecos declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
La Medina de Fes el Bali es una de las mayores del mundo, la atmosfera del pasado de algún modo permanece intacta, convirtiéndola en un lugar único. .Podría pasar una semana entera deambulando por ese interminable laberinto sin sentir el menos deseo de abandonarla.
RIAD DAR CORDOBA
RIAD DAR CORDOBA
En un callejón de la Medina de Fez.
Vivo en un pequeño y tranquilo callejón de la Medina de Fez, en una de las mas grandes, laberínticas y autenticas medinas del mundo árabe.
La vida empieza con la primera llamada a la oración del día, al alba desde el alminar de la mezquita mas cercana a mi callejón, a lo largo del día hay cuatro llamadas mas a la oración la del mediodía, la tarde, la puesta del sol, y la de la noche.
Va despertando el callejón, pasan los barrenderos, gente presurosa al trabajo, niños a la escuela y vendedores de naranjas, verduras, pescado… pasan los afiladores, lo hojalateros, y un sinfín de oficios o menesteres para ganarse la vida. Conmigo habitan varios personajes que a continuación os describiré
Juanjo y Ángeles me eligieron, son españoles cuentan que recorriendo este laberinto que es la Medina donde habitan miles de personas con su carácter y personalidad, sus alegrías y tristezas su riqueza y su pobreza su sentido ético frente a la vida y su talante comercial. Fueron guiados hacia este callejón y atraídos por una de sus casas tradicionales la futura Dar Córdoba. ¿Quién les guio hacia allí?Por que se enamoraron de esta Ciudad se preguntan? Patrimonio de la Humanidad , quizás por sus antepasados andalusís? ahora solo les gustaría pertenecerle, integrarse y entregarse, conocer personas y ser personas que permanecen y no de paso, en una palabra amarla Inch Ala.
Vienen los guías a recoger a los turistas para enseñarles la Medina, los choferes para llevarlos de excursión.
En el callejón hay mendigos, niños camino de la escuela, ancianos pidiendo limosnas y gatos muchos gatos, pasan burritos y mulas cargados con mercancías, son los taxis de la medina, la vida bulle a lo largo del día
Mi vida es tranquila, tengo un patio pequeño pero muy agradable y con armonía, en verano es fresquito y es una delicia descansar en el tomándose un buen te a la menta y charlar de los acontecimientos del día y mi terraza es el sitio preferido al atardecer para escuchar la oración del Magreb cuando se oculta el sol, el cielo se tiñe de rojos, violetas y anaranjados y se escuchan los sonidos del atardecer.
Conozco a muchas personas de todas edades y todas nacionalidades, ya casi chapurreo algún idioma de todo lo que se va quedando en mis paredes y muchas historias y mucho cariño , personas de paso pero que permanecen en mi que dejan sus huella.
Hay muchos mas protagonistas que participan en mi vida y muchas historias alrededor por eso yo llamo “El Callejón de los Milagros” al callejón donde habito.
Pero estas historias os las contare otro día.